Helado de piña

INGREDIENTES:

• 1 taza de piña fresca
• 1 taza de piña congelada
• ½ taza de marañones crudas o almendras crudas, sin piel
• ½ taza de jarabe de arce (Maple Syrup)
• Pizca de sal
• 2 cucharadas de avena rápida
• 3 cucharadas de agua

PROCEDIMIENTO:

Cocinar la avena rápida en las 3 cucharadas de agua. Ponga a un lado para enfriar.

Si tiene avena que le sobró del desayuno anterior, no dude en usar esa. La avena es para darle una consistencia cremosa al helado.

Va a usar la corteza o la cáscara de la piña como lancha o plato para servir el helado. Lave bien la piña con un cepillo para vegetales. Corta la piña fresca en cuatro partes a lo largo. Cortar cuidadosamente la ‘carne’ de la piña preservando la cáscara. (No le retires la corona ya que puede servirte como un mango en donde agarrarla y colocarlas en su lugar).

Ya que tienes la cáscara libre de la fruta, colocas la cáscara de la piña o lanchas en el congelador. Necesitas que se congele para que cuando sirvas el helado, la misma te ayuda a mantenerlo frío el más tiempo posible.

Lo que hago con piña fresca es simplemente dorarla en un sartén o comal, como también puedes dorarla con azúcar entera y resulta con un jarabe dulce de piña que puedes, a la vez que se enfríe, rociar sobre el helado.

En una licuadora potente, colocas el resto de los ingredientes y lo mueles o licuas hasta que ya esté bien cremoso de consistencia.

Verter la mezcla en un recipiente de cristal donde puedas después que se congele por completo manejar el helado con un aparato de servir helados y formas las bolas de helado. Servir en las lanchas de la cascara de la piña que has congelado.